AL FIN EN BRAZOS…

Después de una larga noche, en la que por fin dormí tan bien como hacia mucho tiempo no lo hacia, nos levantamos temprano, me tome los remedios y a las 7:45 paso por nosotros el taxi. La Dominga se quedo acostada con su “lela” y al despedirnos la explicación fue “vamos a buscar a Santiago, tu te vas a ir después con la lela a verlo ya?” y la respuesta fue un natural: “ya, adiós mamaaaaa” se dio media vuelta y siguió durmiendo.

Llegamos al hospital un poco antes de las 8 con maletas y petacas, esta vez para quedaros, nos instalaron en una pieza y me sacaron sangre para ver como iban las plaquetas, según el numero de estas si se podía o no usar la epidural, si estaban muy bajas tendría que ser con anestesie general y con Nacho fuera del pabellón.

Como los resultados se demoraban, pasamos al segundo lugar de cesárea mientras esperábamos, lo que significo esperar hasta las 10:30, hora en que llegaron los resultados y me empezaron a preparar, las plaquetas estaban OK, por lo que entramos al pabellón a por la epidural y nuestro segundo hijo.

El pabellón parecía, o mas bien era, una sala de clases, la matrona con dos estudiantes, el ginecólogo con otros 2 o 3, el anestesista y la enfermera igual …. había tanta gente y era como si estuviéramos solos….

A las 11:38 de la mañana, en el hospital Princess Anne de la Universidad de Southampton, en Inglaterra, salio Santiago, y unos minutos después (que parecieron horas) estaba envuelto en una toalla en brazos de nacho y sobre mi….. un gordo delicioso de 4.240 kgs. y 53 cms. (como querían que saliera solo!!!!!!)

(No puedo seguir escribiendo sin emocionarme hasta el límite del llanto, respiro profundo y continuo…)

Ya no somos tres, ya no tenemos solo una hija, ahora vamos a usar un coche doble, un auto lleno de sillas de niño, voy a tener las dos manos ocupadas al cruzar la calle, serán dos los que lleguen en la noche a mi cama, serán dos los que mojen el baño entero al darse una tina, serán dos llorando de sueño, serán dos los que me digan MAMA….. serán dos…..

Esa noche y la siguiente nos quedamos en el hospital, pasamos la noche los dos solos, y a la vez rodeados de gente, en la sala común…. Fueron las primeras dos noches juntos y probablemente las ultimas dos noches solos…. Tranquilos, con todo el tiempo del mundo para mirarte, contemplarte, adorarte, ver como crujes, como tomas papa, como te estiras y empiezas a adaptarte a esta nueva vida, fuera del agua, lleno de gente alrededor, lleno de reglas y horarios, llena de luces y ruidos…. Espero poder ayudarte en tu adaptación, espero poder ayudarte en tu crecimiento, espero poder ayudarte siempre en lo que necesites, espero poder ayudarte a ser feliz, solo de eso se trata: de ser Feliz, así con mayúsculas. Te quiero mucho, mucho, mucho, te adoro desde incluso antes de conocernos: Bienvenido.