Buscando Que hacer

Hace ya dos semanas que llegamos de Sicilia, que mis papas y la Caquel se fueron, en fin, que estamos instalados en Southampton, sin pensar en movernos, salvo un par de idas a Londres para el cumpleaños de Iñaki a principios de diciembre y para la Navidad.

Estas semanas no han sido fáciles, Nacho con mucha pega en la universidad y nosotras que nos levantamos y quedamos desocupadas, esto podría sonar como el paraíso para muchos pero no para nosotras…. Nos pasamos los días, entre arrancando del frió y buscando algo que hacer.

Pero como dicen por ahí….. “el que busca siempre encuentra” y poco a poco van apareciendo actividades en la agenda, luego de hacer un estudio de factibilidad económica tomamos la decisión de inscribirnos en el Gimnasio de la universidad, lo que nos permite ir a nadar a la piscina temperada, actividad que ha pasado a ser la mas frecuente, en especial los días de mucho frío, es una actividad que se combina perfectamente con la falta de luz que nos acompaña desde las 4 de la tarde. Además es de las pocas actividades que puedo realizar sin que los 7 meses de embarazo me pasen la cuenta y como si todo esto fuera poco, en el agua puedo tomar en brazos a la Dominga todo el rato y no me pesa (ni ella ni la guata)…. es el paraíso….

A las largas estadías en el agua se han sumado dos nuevas actividades semanales: el Family Point de una parroquia vecina los martes de 10 a 12 y la “Rhyme Time” de la biblioteca central los jueves de 2 a 2:30.

El Family Point es un lugar de encuentro, en este caso en una parroquia de no se que religión, ni anglicana ni católica, donde van mamas o papas con sus hijos(as) menores de 5 años. Se desarrolla en una sala grande (como un gimnasio) que esta llena de juguetes y niños jugando, mientras las mamas (la mayoría no inglesas) conversan entre ellas. Además hay un grupo de funcionarias municipales que prestan su asesoría: asistente social, midwife, enfermera, etc… En este lugar, por ejemplo se hacen los controles de salud de los niños (como los controles de “niño sano” de chile). Además de los juguetes y el resto de los niños, a las 11 se lavan las manos, se sientan alrededor de la mesa y comen un “snack” que tiene como objetivo enseñar a los niños a comer comida sana, es decir frutas o verduras, queso y leche. Todo esto por la suma de 20p. ($200 pesos chilenos).

El otro lugar es la Biblioteca, donde hay un lugar (al fondo) donde los niños no solo son bienvenidos, sino que los invitan, no importa si gritan o corren, de hecho la actividad consiste en eso: durante media hora dos monitoras cantan y tocan instrumentos musicales rodeadas de niños menores de 5 años acompañados por sus mamas, que también cantan. Esta es solo una de las formas en que la biblioteca se acerca a los niños, pero no es la única, la Dominga (por vivir en la comuna) tiene una tarjeta de socia de la Biblioteca, con ella podemos sacar hasta 30 libros por un mes, y por ser ella menor de 5 años, no le cobran por libros rotos o rallados, lo importante es fomentar la lectura. Además en el sector de niños de la Biblioteca hay mesas con hojas para pintar y lápices, hay lugar para correr y jugar y miles y miles de libros. Como si esto fuera poco al entregarle la tarjeta le regalan un libro. Ya se podrán dar cuenta de porque este se ha convertido en uno de los lugres preferidos de la Dominga, “La Viloteca”.

Y así, poco a poco hemos ido agregando actividades a nuestra agenda semanal, en la que cada vez que el tiempo lo permite reaparecen las estadías en las plazas, las persecuciones de ardillas y las caminatas por la orilla del mar….